miércoles, 23 de septiembre de 2009

Termolipolisis

Consiste en la aplicación de calor con fines terapéuticos. La termolipolisis se utiliza para tratar la celulitis, adiposidades localizadas y casos de obesidad generalizada. El principio de acción de la termolipolisis es el aumento de la temperatura corporal por sobre los 36º. Para ello existen diversas técnicas y equipos. Cuando se trata una celulitis el calor debe penetrar hasta la hipodermis. Si se trata de una obesidad generalizada el calor debe aplicarse en todas las zonas afectadas. Clasificación de las técnicas

  • Aplicación de cuerpos sólidos calientes: Se incluye en este grupo la aplicación de esterillas, mantas eléctricas, termóforos y hotpacks. Estos elementos producen calor superficial, por lo que se emplean para potenciar la acción del calor a nivel cutáneo generando vasodilatación superficial y sudoración.
  • Aplicación de cuerpos semisólidos calientes: Uso de barros y arcillas, parafinas y parafangos, máscaras termoactivas de algas. Estos producen calor superficial, potenciando así los efectos del calor a nivel cutáneo. También aportan minerales (ciertos barros), sustancias orgánicas y de yodo (algas), tienen efecto desintoxicante (arcilla) y de lubricación (parafina).
  • Aplicación de líquidos y gases calientes como Hidroterapia, sauna y baños de vapor: Habitualmente se aplican en todo el organismo. Producen un calor superficial pero potenciando los efectos generales de la termolipolisis por lo que se emplean básicamente en tratamientos orgánicos generales de desintoxicación y relajación.
  • Aplicación de Ultrasonidos: Los efectos térmicos que provoca el ultrasonido se utilizan especialmente en el tratamiento de fisioterapia, rehabilitación, traumatología, cicatrices retráctiles, prótesis mamarias encapsuladas y queloides.

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